Este disco figura como uno de los más buscados en mi vida sin éxito. Está descatalogado y es un ítem muy jodido. Tampoco pienso pagar fortunas por alguien que lo vende en Ebay, Así que esta review se hará basandome en una copia de CD gracias al haber obtenido los mp3 correspondientes en la WWW. La primera vez que escuché a estos noruegos fue en 1991 cuando en la Heavy Rock And Pop pasaban con cierta frecuencia los temas de este “The Way To Go”. Para los que recuerdan esas épocas el programa era de 00:00 a 04:00 de la mañana y uno solía estar con el cassette listo para disparar el REC en la cassettera (Mientras se intentaba no quedarse dormido en el intento) a fin de armarse una selección de temas decentes. Así fuí conociendo agrupaciones como Equinox, Sabbat, Devastation y otros. La diferencia es que de las anteriores si conseguí los originales en años posteriores.Yendo a la parte biográfica, Equinox fue una agrupación de thrash noruego que sacó una serie de discos que pasaron totalmente desapercibidos pese a su muy buen nivel. El resultado obtenido en este “The Way To Go” (Segundo disco) es descomunal, poniendo a la banda codo a codo con titanes como Toxik, Hexenhaus, Unleashed Power, Annihilator y demás bandas de thrash intrincado e hiper- elaborado. Fans de estos grupos están advertidos: Busquen por Internet este CD porque se van a caer de culo y rebotar 10 veces. Se abre la placa con el descomunal y riffero “Fine By Me”... un corte por acá, un cambio de ritmo por allá, riff disparado y de ese sale otro que le precede a un galope mientras aparece un solo de viola. ¡Que festín la puta que lo parió!. La abundancia de recursos más lo bien utilizados que están hacen de este tema una obra de arte que termina con el cantante haciendo la cuenta regresiva mientras la banda suena ultra ajustada y al rojo vivo.
“Inner Self” coquetea más con el thrash ortodoxo, el vocalista tiene inflexiones de Hetfield pero Equinox sigue apostando por la elaboración de arreglos elaborar antes que el machaque más primal del género. Le precede el ENORME instrumental “Skrell” con 10000 variantes de riff, más cortes en donde uno menos los espera, lujos por parte del bajista y la flamante inclusión de secciones de violines que aparecen en partes del tema (Creer o reventar). La banda hace thrash pero con un nivel de depuración como nunca he escuchado en mi vida, recordando a las bandas que mencioné arriba sin ser una necesariamente una “copia” de las mismas.
Mi favorito de la placa es el perfecto “Godamadog”, una suerte de vuelta de tuerca de “Fade To Black” (Metallica) pero cruzado con el mejor Meliah Rage (Del álbum “Kill To Survive”). En la intro se incluye una exquisita línea de armónica que te emociona (Leyeron bien: armónica), el cantante recuerda bastante a Mike Munro (Si, Meliah Rage de nuevo), uno no puede evitar la emoción al escuchar como se complementan sus voces con los violeros logrando esas melodías tan exquisitas con riffs armoniosos y simples en vez de complejos sin que la tendencia a elaborar que tienen estos ñatos se pierda por completo.
Esa variedad de ideas en un estilo que muchos tildan de cuadrado/limitado/falto de recursos (En algunos casos puede ser pero no hay que generalizar a todo el género) hace de este disco un peso pesado que cualquier fan del estilo está obligado a escuchar. Siguen los aciertos con “Quest For Fire” el cual tiene más machaque de violas furiosas/filosas. Metallica es una influencia innegable en estos noruegos pero le agregan muchísimos más elementos a su música. “Conveyer Of Truth” en su intro me recuerda al “Set The World On Fire” de Annihilator para luego desatarse a todo machaque provocando el headbanging inmediato de quién lo escucha. De 02:08 a 02:50 los riffs serruchan a full.
“Flower Power” tiene un título engañoso, es el tema más “Mekong Deltoso” de los ocho... bien oscuro, rebuscado y delirado con violas que se retuercen, se enderezan para volver a deshacerse en riffs complejos. El vocalista aquí da catedra y hasta manda algún falsete aislado. La sección de 02:30 a 02:57 tira la casa por la ventana.
Se cierra esta joya con “What Is It Worth”, iniciada con unas acústicas logradas que desembocan en unos riffs bombásticos a medio tiempo, se amaga ir más rápido pero las acústicas (Que en algún momento recuerdan a las de “In My Darkest Hour” de Megadeth) se encargan de dosificar y poner freno/clima al tema.
Estos tipos son unos CAPOS no sólo como compositores sino con intérpretes. Y es triste advertir que Equinox fue otra banda más que pasó INADVERTIDA mientras los fans se dedicaban a consumir otros estilos muy buenos de thrash pero más difundidos y digeribles para el escucha promedio (Metallica y Megadeth a la cabeza).
Son ocho temazos. No le pongo 10/10 porque la producción pudo haber sido mejor (Es buena y nada más), pero estuve muy cerca y tentado de hacerlo.
Equinox con este disco casi rozó lo perfecto, sacando una perla del thrash... están a tiempo si se lo proponen.
REEDICION URGENTE DE “THE WAY TO GO”, YA!!!
Calificación: 9.5/10
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