Al hueso: este es uno de los discos más salvajes de black metal que escuché en mi vida y lo hago con veinte años de retraso. ¿Cómo surge esta banda?. Allá por 1993 en Estocolmo se forma un cuarteto que saca un promo y por cosas de la vida se van todos de la banda salvo el bajista que decide seguir con el emprendimiento asumiendo la guitarra y la voz más un baterista. La persona en cuestión aquí es "Arioch" pero años después se transformó en "Mortuus" cuando hace también veinte años atrás reemplazó a Legion en Marduk. El tipo también anduvo en una banda muy buena de black llamada Triumphator y sin dudas es un talento versátil. En esta masacre de una hora y cuarto él más Necromorbus (Batería) con Nachash (Guitarra) destilan ese black palero que a la vez está flanqueado por riffs totalmente destructivos. El asedio es constante y el oyente que no tenga el estómago adecuado debe irse de esta batalla. Letras muy anticristianas y samplers con cantos gregorianos o similares estratégicamente puestos, esto es largo y pega, sangra, clamando por más. Acaso sea un disco con cero dinámica - Acá es todo un bombardeo - pero el producto final es tan carnicero y despiadado que vale la pena. Todos los temas son para aplaudir de pié pero me quedo en especial con los casi trece minutos de "Circle Of Eyes". Arioch usa no solo su voz que no es la tradicional black sino más grave: en algunos temas va tramando capas vocales que logran más ferocidad de la que ya los temas exudan. Nunca es tarde y si te va todo lo más violento del black metal sumate al funeral.
Calificación: 9/10
Calificación: 9/10
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