Una de las bandas más ignoradas de hard rock de la década del 70 y un diamante en bruto. Corría la mencionada década y en Inglaterra había una camada de bandas glam que se perfilaban como interesantes (Queen estaba entre ellas). Muchas de ellas quedaron en el estatus de culto cosa que no ocurrió con la grandiosa banda mencionada entre paréntesis. Yo lo descubro gracias a un cover hecho por una banda de thrash metal llamada Heathen. Si.... ¡Thrash Metal!. Y los covers se cuentan por todos lados y de distintas bandas/artistas, diría como pocos. Saxon, Raven, Ace Frehley, Vince Neil y hay más. Por accidente al venir Journey a la Argentina veo a una de las reencarnaciones de la banda en vivo que hacía de soporte (La del bajista Steve Priest) y fue un gran show. Ahí empecé a comprar sus primeros discos, pero en realidad la genialidad comienza aquí. Este es su segundo disco en donde los tipos meten un rock aguerrido, con cosas proto-thrash ("Set Me Free" el tema que versiona Heathen) y muchos coros, armonías, clima de fiesta, gancho, riffs hipersólidos del guitarrista Andy Scott y la voz super carismática de Brian Connolly. Eran otras épocas uno se sentaba ponía play yte podías topar con tipos en el máximo de inspiración como estos en donde dieron nueve temas en donde ninguno baja del muy bueno. Un disco MUY potente, divertido, disfrutable, pero a la vez con la suficiente agresión para llamar la atención de un fan de thrash metal. Irónicamente los que más influencia tomaron de estos británicos fueron las bandas americanas de hard rock como Mötley Crüe o Ratt si bien eran muy respetados hasta por Ramones. Definitivamente Sweet fue un caso único. Paseate por YouTube y mirá las presentaciones de ellos en TV y te darás cuenta. Vuelvo al inicio: injusticia total que estos tipos no sean considerados entre la elite del rock británico de los setenta.
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