Esta banda en los 80s fue una de las excepciones pensantes norteamericanas de heavy metal. Con un comienzo muy auspicioso en donde la cosa pasaba más por un Iron Maiden pretencioso y progreta, para este segundo álbum el quinteto de Seattle logra un resultado más texturado, más audaz, y arriesgado. Se trata de un trabajo medio dificil para el oído común pero lo considero como el disco en donde la banda se encuentra con su mejor personalidad. Neil Kernon de productor, sonido limpio, músicos de nivel superlativo (No puedo dejar de pensar en la garganta de Geoff Tate y la batería de Scott Rockenfield), se larga la "Furia Por Decreto" como caprichosamente lo editaron en Argentina allá por los 80s. Si uno veía la imagen de la banda podía pensar que eran casi glam: error. Eso me pasó a mi de joven viendo revistas nacionales y dejé pasar el tren hasta el disco siguiente. De esta época no hay nada que suene agresivo y a la vez preciso, pretencioso, todo esto agregado por composiciones excelentes como el abridor "Walk In The Shadows" (Coros del carajo), "The Whisper", otras más filosas como "Surgical Strike", malabares en "Chemical Youth (We Are Rebellion)", todo a la sazón de un Tate PERFECTO en la voz, secundado por Chris DeGarmo en la viola. Hay un cover de una banda canadiense pop (Dal Bello, ni idea quienes eran) que zafa y no desentona tanto llamado "Gonna Get Close To You", pero no puedo explicar la emoción, pompa y locura que me genera escuchar "London" (Un tema más "remanso" pero con "algo" que no puedo definir) cada vez que repaso este CD. Los coros, el clima creado, ROCKENFIELD. Y "Rage For Order" agrega eso a Queensrÿche, teclados, atmósferas, es una banda creciendo, madurando y ya avisando que no es para cualquier oyente. Disco no apto para primera oída, y sí para escucharlo con detención. Lo mejor estaba al caer, el que avisa no traiciona y este CD fue más que "Una Advertencia", una consolidación de "La Q".
Calificación: 9/10
Calificación: 9/10
No hay comentarios:
Publicar un comentario