Para la banda más grande que haya parido el heavy metal inglés uno no debería “matar” un lanzamiento de ellos. Pues decididamente el día llegó y lo lamento con el fan que llevo dentro, pero esta vez no puedo dejar pasar de alto lo ABURRIDO que se me hizo este CD. Igual ya hablé aquí de los que considero los mejores discos de Maiden, pero hagamos un poco de resumen histórico ultrarrápido de cómo de 1982 para 2010 llegamos a esto.
Les pido por favor que algún punto en desacuerdo o demás, hay un CBox en línea o lo comenten, ya que todas las reviews que leí han sido increíblemente buenas.
Yo a este lanzamiento lo encuentro increíblemente largo, desfocalizado, con una banda con la cabeza en otra y con un 80% de temas que parecen sobrantes de lo que quisieron hacer. Vayamos a la historia express….
Desde el primer disco Iron Maiden fue creciendo, su primer pico fue el excelente “Killers”. Se va Di Anno y entra Bruce. La banda pega un tremendo batacazo con el enano y su voz operística sonando como una sirena de alarma, logrando picos en “Piece Of Mind” y “Somewhere In Time” (Ambos discos están reseñados aquí). Sacan otro buen laburo con “Seventh Son…”. Se va Adrian Smith, y entra Janick Gers… ya era una señal de que el techo fue alcanzado. “No Prayer…” sin dudas fue el disco más flojo sin ser malo, entre los temas más rockeros y faltos de gancho, más la banda que no andaba con las pilas (Paralelismo con este lanzamiento). Si bien remontaron un poco con “Fear Of The Dark”, Bruce Dickinson pega las hurras y el mundo se paraliza. Steve Harris tenía unos reemplazos posibles de lujo, pero elige a un vocalista que no era el más indicado para la banda: Blaze Bayley. Desde el vamos el tipo se las vio jodidas, pero con el excelente “The X Factor”, sus limitaciones vocales quedaron disimuladas por las composiciones buenas, oscuras y más acordes a su registro. El pobre hombre si quedaba en posición adelantada cuando en vivo tenía que cantar cosas como “The Trooper”. A esto le siguió otro disco del montón “Virtual XI” en donde la chatura de los temas puso en evidencia más a Blaze. Los seguidores clamaban por un regreso de Bruce (Que sacaba un disco solista tras otro, uno más sublime que otro). Harris (Realmente desorientado cuando siempre fue el guía de la banda) creo yo intenta "enmendar el error" ya que la cosa explotaba por sobre todo por la enorme presión ejercida por los fans tras el disco mencionado. Tras varias situaciones posibles y negociaciones con Dickinson, despide a Blaze (Que liberado de Maiden tuvo lanzamientos solistas EXCELENTES, chequeen los discos de "Blaze" y "Blaze Bayley" por favor... en especial los dos últimos de "Blaze Bayley"), vuelve Bruce (Con Adrian Smith)… y se queda Janick Gers. El resultado es un Iron Maiden 2000 con discos muy largos y guitarras embarulladas. “Brave New World”, “Dance Of Death” y “A Matter…” marcaron un Iron Maiden predecible… introducciones acústicas largas, temas largos más las cabalgatas de siempre, pero siempre había cinco o seis temas que salvaban la cosecha. Acá a duras penas uno o dos lo hacen.
Les pido por favor que algún punto en desacuerdo o demás, hay un CBox en línea o lo comenten, ya que todas las reviews que leí han sido increíblemente buenas.
Yo a este lanzamiento lo encuentro increíblemente largo, desfocalizado, con una banda con la cabeza en otra y con un 80% de temas que parecen sobrantes de lo que quisieron hacer. Vayamos a la historia express….
Desde el primer disco Iron Maiden fue creciendo, su primer pico fue el excelente “Killers”. Se va Di Anno y entra Bruce. La banda pega un tremendo batacazo con el enano y su voz operística sonando como una sirena de alarma, logrando picos en “Piece Of Mind” y “Somewhere In Time” (Ambos discos están reseñados aquí). Sacan otro buen laburo con “Seventh Son…”. Se va Adrian Smith, y entra Janick Gers… ya era una señal de que el techo fue alcanzado. “No Prayer…” sin dudas fue el disco más flojo sin ser malo, entre los temas más rockeros y faltos de gancho, más la banda que no andaba con las pilas (Paralelismo con este lanzamiento). Si bien remontaron un poco con “Fear Of The Dark”, Bruce Dickinson pega las hurras y el mundo se paraliza. Steve Harris tenía unos reemplazos posibles de lujo, pero elige a un vocalista que no era el más indicado para la banda: Blaze Bayley. Desde el vamos el tipo se las vio jodidas, pero con el excelente “The X Factor”, sus limitaciones vocales quedaron disimuladas por las composiciones buenas, oscuras y más acordes a su registro. El pobre hombre si quedaba en posición adelantada cuando en vivo tenía que cantar cosas como “The Trooper”. A esto le siguió otro disco del montón “Virtual XI” en donde la chatura de los temas puso en evidencia más a Blaze. Los seguidores clamaban por un regreso de Bruce (Que sacaba un disco solista tras otro, uno más sublime que otro). Harris (Realmente desorientado cuando siempre fue el guía de la banda) creo yo intenta "enmendar el error" ya que la cosa explotaba por sobre todo por la enorme presión ejercida por los fans tras el disco mencionado. Tras varias situaciones posibles y negociaciones con Dickinson, despide a Blaze (Que liberado de Maiden tuvo lanzamientos solistas EXCELENTES, chequeen los discos de "Blaze" y "Blaze Bayley" por favor... en especial los dos últimos de "Blaze Bayley"), vuelve Bruce (Con Adrian Smith)… y se queda Janick Gers. El resultado es un Iron Maiden 2000 con discos muy largos y guitarras embarulladas. “Brave New World”, “Dance Of Death” y “A Matter…” marcaron un Iron Maiden predecible… introducciones acústicas largas, temas largos más las cabalgatas de siempre, pero siempre había cinco o seis temas que salvaban la cosecha. Acá a duras penas uno o dos lo hacen.
“The Final Frontier” en mi opinión es por lejos, lo peor en la carrera de la banda. Considero que en este momento Iron Maiden debió haber vuelto más al espíritu de sus discos de ocho temas derecho a tu yugular (No digo que rehagan “Piece Of Mind”) pero algo más directo sin perder ese epicismo que tanto nos emociona. Esto empieza con un batifondo infernal de casi cinco minutos que desemboca en el tema título, con estribillo que se repite con apatía total… en las violas, las composiciones…. Y Bruce!!. La misma suerte corre el malogrado single por Internet “El Dorado”. La cosa amaga mejorar un tanto en “Mother Of Mercy” (Por Bruce en especial) pero vuelven al pozo en “Coming Home”. Hay solo un tema que dignifica a la Doncella en serio y es el excelente “Isle Of Avalon”, que da la impresión de que recuerdan como pudo haber sido todo. No puedo dejar de mencionar como me embolé con los once minutos que cierran la placa: “When The Wild Wind Blows” me resultó un esfuerzo para terminar de escuchar. En lo personal tras más de veinticinco años de escucharlos, me cansé de Iron Maiden, de los temas largos, de las cabalgatas, de los discos de más de una hora, de más de doce canciones, y de Janick Gers, un tipo que no aporta nada a la banda (Salvo en vivo que hace malabares). LA DECEPCION DE ESTE 2010, me la veía venir, pero parece que no todos ven como yo a este disco. Ya el título me parece una premonición… la frontera final. No le veo arreglo con el próximo, pero nunca subestimo a una GRAN BANDA.
Calificación: 5/10
No hay comentarios:
Publicar un comentario