Uno de los lanzamientos más esperados del año que fue a la vez rodeado de hechos especiales. La banda prescinde de los servicios vocales de Rob Dukes tras casi nueve años de pertenecer a ella. Los motivos nunca fueron muy claros y al poco tiempo se anuncia que Steve “Zetro” Souza retorna a Exodus. Aparentemente las tomas de Dukes estaban completas, fueron descartadas y el nuevo/viejo cantante registró lo suyo y hasta colaboró en algunas letras. Todo muy extraño teniendo en cuenta de que se asumía una muy mala relación entre Gary Holt y el repatriado cantante, más el despido intempestivo de un tipo que los bancó, apuntaló durante años y se fue haciendo sus pinitos.
Dejando estos detalles “Blood In Blood Out” es un disco thrashero del carajo. Algunos pensaban en un “Tempo Of The Damned” readaptado o algo así. Error. Exodus se renutre de sus discos ochentosos, con el foco bastante localizado en “Fabulous Disaster”. Los cinco suenan con hambre y en cada tema se siente como si hubieran dejado todo en cada nota. “Black 13” supera los seis minutos lo cual nos hace pensar de que la cosa puede ir más para una onda “Atrocity” pero Holt sacude con riffs ásperos, enojados y sacados del arcón de “Fabulous Disaster” o bien “Pleasures Of The Flesh”. El tema título no decae, lo corto y al grano, pesado y efectivo hace que el impacto no sea inminente sino noqueante. “Collateral Damage” es uno de mis favoritos mientras Tom Hunting (De performance DESCOMUNAL) hace tronar su instrumento, los riffs explotan por todos lados comienza como un precalentamiento para luego sin ir a los gomazos avanzar para arrollar. Zetro de nuevo se luce y hasta hay un aire Slayeresco en el furioso estribillo resaltado por esos bienvenidos coros que tanto usaban en los ochentas. “Salt The Wound” es el único tema que podría haber estado en “Tempo Of The Damned” y fue el adelanto del disco ya que como invitado en el participa Kirk Hammett haciendo un solo en el mismo (Sin pena ni gloria).
“Body Harvest” es uno de los pocos temas en donde Zetro pudo componer letras, aquí junto a Altus (100% la música) y Gibson, el estribillo es intenso y lleno de orgullo. Los coros acentúan toda esta impronta. “BTK” tiene una marcha arrolladora con Chuck Billy en los coros como invitado bien en su registro más death metalero, el tema parece contagiarse de un aire Testament en ciertos pasajes de guitarras sin dejar el ADN Exodus. “Wrapped In The Arms Of Rage” tiene un riff similar al de “Corruption” (El primero que se repite como cuatro veces) pero a la vez Holt y Altus se baten a duelo con un muy buen gusto melódico. “My Last Nerve” es otro punto elaborado y muy logrado compositivamente con un estribillo más calmo en donde las violas armonizan y le dan un gusto muy personal.
Jack Gibson se hace más presente (Lo está bastante en toda la placa a comparación de anteriores) y su bajo en diversos pasajes marca definidamente el pulso junto a los incansables golpes de Hunting. “Numb” retoma el Exodus más alocado y acelerado onda “Pleasures…” con riffs menos melódicos y más vieja escuela tal cual ese álbum.”. “Honor Killings” está totalmente escrita por Lee Altus y mantiene la pesadez, el ardor, tensión y velocidad que predominan en toda la placa. Batería inquieta y que repiquetea bombo sin taladrar, golpe, plato, todo sincronizado con el bajo audible y Souza haciendo lo que mejor sabe para mitad del tema bajan un cambio y arremeten de nuevo los bienvenidos/viejos “Coros tribuneros”.
Lo de Hunting y sus bombos ya es magistral secundado por machaques certeros de Holt/Altus. “Food For The Worms” cierra este inolvidable festín con Holt enloqueciendo su viola al minuto (¡Que riff!) y el quinteto acelera a full con tupa tupa sin renunciar a dosificar el tempo cuando el tema pide algo de oxígeno para volver a ese formidable machaque alternado con la base dando catedra en medio tiempo. Zetro nuevamente parece como si cantara en 1986-1989 pero con una energía de retorno muy palpable.
Sacando los “In” and “Outs” medio inentendibles que se han dado en el quinteto de San Francisco, debo decir que este disco es una maravilla y no le pongo la máxima calificación sólo porque se extiende más de una hora con once temas y acaso con más brevedad hubiera sido perfecto. Acaso más síntesis hubiera redundado en algo más colosal. “Blood In Blood Out” pide permiso y se pone al lado de “Fabulous Disaster” y en menor medida “Bonded By Blood” como el mejor trabajo que concretaron estos tipos.
Calificación: 9/10