viernes, 20 de febrero de 2009

MUNICIPAL WASTE “Hazardous Mutation” (2005, Thrash Metal/Crossover)


Este cuarteto de Virginia es la fiesta y resurrección del thrash/crossover en el comienzo del Siglo XXI. Tras dos discos editados Earache los ficha y lanzan este tercer álbum. La review será breve como los veintiseis minutos que duran los quince temas que lo componen. Imaginense, D.R.I., Nuclear Assault (El vocalista Tony Foresta suena a una cruza entre Kurt Brecht y John Connelly) y el Old School Thrash reinterpretado con una energía y convicción que no dejan lugar a ninguna duda: ¡Esto es agresión más diversión!.

La propuesta de la banda en vivo cruza la adrenalina musical con la ya mencionada “diversión”: constantes circle pits (Una suerte de ronda en donde el público corre frenéticamente haciendo círculos) y un sinfín de stage dives por parte de la audiencia en cada show más juguetes que vuelan de la banda al público y viceversa, tales como tablas de surf Para los stagedivers, pelotas playeras, palos de goma, catapultas para saltar cuando uno sube al escenario y volar aún más por los aires.


No hay un tema de más de tres minutos y son una concentración de agresión, energía e ira que te trompean sin asco. Suenan ensamblados, son jóvenes, y trayeron de vuelta lo mejor de estos viejos estilos. No hace falta mencionar temas, son todos palo y a la bolsa. De desperdicio estos pibes no tienen nada, y sí mucha diversión con una tremenda dósis de energía. A buen entendedor, pocas palabras.

Calificación: 8.5/10.

jueves, 19 de febrero de 2009

ANIHILATED "The Ultimate Desecration" (1989, Thrash Metal)


(For ENGLISH version of this review, please read below)

El segundo disco de esta banda thrasher londinense marca un paso adelante en relación con su debut “Created In Hate”. La propuesta es nétamente metálica y los guiños al punk que tanto se advertían en “Created...” desaparecen. Instrumentalmente la banda suena muy ajustada, con unas guitarras más depuradas, filosas y el vocalista/guitarrista Si con un rango más “enojado” en su voz.

La influencia del primer Slayer sobrevuela en los ocho temas (Hay una introducción y un outro). Quienes amen la velocidad sentirán la sangre fluir por sus venas con “Lethal Dose”, “Legacy Of Hate” e “Into The Flames... Of Armaggeddon”, llenos de agresión y riffs filosos con virulencia. Otro ejemplo es “Skinned Alive” y su virulencia lascerante, con una letra en donde se critica la matanza de focas y el maltrato a los animales.

Que la velocidad sea lo primordial no implica la presencia de tiempos medios con machaques de viola en temas como “Lost Souls”, o variaciones rítmicas mezcladas de riffs variados y dinámicos caso de “No Rest For The Wicked”, y mismo “Enter The Realm” con su alta carga de enojo y ritmo marchoso.

“Internal Darkness” amaga con bajar las revoluciones en su inicio, con Bod y Si creando un clima muy oscuro, a medio tiempo con guitarras muy logradas para a partir de 04:30 hasta 05:02 estallar en la más genuina furia.


“The Ultimate Desecration” es un excelente disco de thrash metal, ideal para fans de Slayer y ni hablar, del Old School Thrash Metal. Esta banda merece mucho más reconocimiento no sólo por sus viejos discos, sino por su reciente reunión. Marquee Records reeditó este CD con un booklet lleno de anécdotas, comentarios de las letras y abundantes fotos de la banda.

Si quieren thrash metal que los estampe contra la pared, no duden en buscar estas creaciones de odio.

Calificación: 9/10.

ENGLISH:

The second record of this London thrash metal band marks a real step forward in comparison with their first LP effort “Created In Hate”. Here the music is very focused into metal and the punk influences founded in “Created...” dissapear. Instrumentally the band sounds really tight with developed, sharpened guitars plus Si (Guitar/Vocals) with a voice that shows more anger.

The influence of old Slayer is remarkable and present, flying over the whole songs. For those who like speedish moments will feel their blood pumping on their veins with “Lethal Dose”, “Legacy Of Hate” or “Into The Flames... Of Armageddon”, all of them plenty of aggression and crushing riffs. Another example is the lascerating virulency of “Skinned Alive”, with a letter that criticizes the seal cull.

That the speedness and non-stop guitar attack is the primordial factor of this album doesn’t mean that we could find mid-tempos with strong rhythym guitars such as “Lost Souls”, or rhythym changes mixed with dynamic and consistent riffings in “No Rest For The Wicked”, or “Enter The Realm” with a high charge of anger.

“Internal Darkness” attempts to slow down the RPM during the first minute with Bod and Si creating a very dark climax starting a mid tempo with worked guitars, but from 04:30 to 05:02 the song really explodes in a real fury and madness.

“The Ultimate Desecration” is an excellent piece of thrash metal ideal for Slayer fans and Old School Thrash Metal lovers. This band really deserves a lot more of recognition not for have released two remarkable works during the eighties: they have reunited and are back for more. Marquee Records from Brazil re-release this CD (And also “Created...”) with a booklet full of histories, commented lyrics, and pics of the band. If you want thrash that stamps you to a wall, go for this creations of hate.

Rate: 9/10.

miércoles, 18 de febrero de 2009

KISS "Dynasty" (1979, Hard Rock)


"Edición Norteamericana"

Empiezo a tipear en el Word y me embarga la emoción. Había una vez un niño de siete años que por televisión vió cuatro tipos maquillados y con platadormas interpretar una música intensa que realmente le llegó al corazón. Sus padres creían que ese grupo era una porquería ,y su música un batifondo, pero al llegar el regalo de cumpleaños para el octavo aniversario del muchacho le regalaron – ante la inflexible insistencia del festejado - en cassette este disco. Para 1992 recién lo pude tener en CD, e incluso su lanzamiento japonés remasterizado (Ver foto más abajo). Pues ese chico soy yo y mi puerta de inicio al heavy metal fue KISS gracias a este álbum, de esto ya hace 29 años atrás allá por mediados de Febrero de 1980.

Para hablar de “Dynasty” hay que disociar los temas que lo componen de lo que KISS había grabado anteriormente (Cosa desconocida para mí de niño pero que con los años fui armando, la etapa que comprende los discos de 1974 a 1977, infinitamente más pesados y crudos). Este álbum es “el más accesible” que editó el cuarteto hasta ese entonces, pero el material no es en absoluto malo. Estamos ante un muy buen álbum situado entre el A.O.R./Hard Rock con algunos tientes poperos y arreglos acertadísimos.

La bolichera “I Was Made For Lovin’ You” con su estribillo ganchero - El As de espadas de KISS en todos sus discos: estribillos que se pegan como chicle - quedaría inmortalizada como el tema más carácteristico de ellos y salió en un momento en donde la música “disco” era epidemia en los Estados Unidos. Ace Frehley se despacha con “2000 Man” (Un cover de The Rolling Stones) desgranando un rock enojado y rítmico a comparación de la primera canción.

En “Sure Know Something”, Paul Stanley conmueve al oyente con su voz tan distintiva - Con mucho feeling y enunciación - y un balance entre el relax y un estribillo que explota sin aviso. Peter Criss hace su único aporte a la placa (En todo sentido) con “Dirty Livin’”, por lejos el tema más pedorro del CD. El histórico baterista estaba destruído por el alcohol y las drogas, por ende participó solamente en él y su ejecución: en el resto del álbum está tras los parches Anton Fig).

Los momentos de más rock intenso y ardiente con dientes apretados vienen de la mano de “Hard Times”, en donde Ace Frehley canta con esa voz de atorrante y su Gibson desgrana riffs estremecedores, o el enojo de Gene Simmons con guiños al pop en “Charisma”, la vibración de “Magic Touch”, en donde Paul Stanley se revela como un intérprete más compenetrado con el feeling del tema y su composición. “X-Ray Eyes” es un tema por completo desechable, pero las papas se salvan de nuevo con Ace y su vibrante rock titulado “Save Your Love” que cierra la placa. La producción a cargo de Vini Poncia hace que el producto final sea impecable en lo que a sonido concierne.


"Edición Japonesa Remasterizada"

Para quién se inicie en KISS o nunca los haya escuchado no recomiendo este disco: vayan a sus inicios derecho (“KISS”, “Hotter Than Hell”, “Dressed To Kill” o si quieren “Alive!” que tiene en vivo temas de estas tres placas y es asesino). Pero para mí fue el puntapié, mi marca a fuego, y por ende tiene una alta carga emotiva personal.

Mi dinastía de cassettes (Y muchos años después CDs) empezaba a nacer gracias a este muy buen trabajo del cuarteto neoyorkino, por más que muchos no coincidan conmigo.

Calificación: 8.5/10

miércoles, 11 de febrero de 2009

TESTAMENT “The New Order” (1988, Thrash Metal)


Cuando tenía 17 años descubrí un grupo en una disquería especializada que me voló la cabeza por su thrash furioso, rápido y manejo de melodías/solos inusuales para el género. Si, me inicié a Testament con su disco debut “The Legacy”. Pero al año siguiente en vez de escuchar este segundo disco, adquirí el tercero (“Practice What You Preach”) puesto que se había editado en el país a través de Atlantic. Tras haber quedado del coco con ese tercer y excelente disco fui a por el que me faltaba en aquellos años, justamente, este “Nuevo Orden”.

“The New Order” es un buen disco de thrash... y nada más.

Muchos fans de Testament muy seguramente se sorprenderán por mi opinión escueta. Acaso en mi caso personal quedé “atrapado” entre el descomunal debut que fue “The Legacy” y el thrash relampagueante con la dósis ideal de melodías que hacían volarte por los aires en “Practice What You Preach”, lo cual siempre me complicó dilucidar el porqué nunca tuve “feeling” hacia este segundo álbum.

La banda mejora a nivel compositivo y en ejecuciones de los músicos. Alex Skolnick aquí empieza a brillar en serio, Chuck Billy utiliza una voz más modulada y entonada. ¿Entonces donde está la cosa?. Hay temas sumamente thrashers caso de “Into The Pit”, “Disciples Of The Watch”, o el tema título (Los momentos más destacados a mi paladar) que conviven al lado de cosas como el malogrado cover de Aerosmith “Nobody’s Fault”, un instrumental que pretende ser una suerte de “The Call Of Ktulu” resumido como “Musical Death (A Dirge)” y el apenas aceptable “The Preacher”.


¿Será que “The Legacy” te llevaba tema por tema como si fueras por un tubo y acá “algo” falta?. ¿La producción de Alex Perialas?. No es santo de mi devoción y acá cumple, punto. Puede que la batería de Lou Clemente en la mezcla haya quedado muy “pegada” a las violas de Peterson/Skolnick, aunque no es algo que tire todo abajo en el mal sentido. Quiero pensar que precisamente siempre ubiqué a “The New Order” como un disco “de transición”. Del thrash palero y furioso, este es el puente al más refinado y bien producido. Pero los temas en su mayoría no me enganchan y admito que no son en absoluto malos (Caso de “A Day Of Reckoning” o “Trial By Fire”, que me parecen OK y nada más).

Lo que sí me encantó siempre de este disco es la MAGNIFICA portada y el título del álbum aunque este no represente en absoluto la música. La banda mismo en retrospectiva se refiere a este trabajo en diversos reportajes como hecho a las apuradas y compuesto en giras con acústica en mano. El nuevo orden lo encontraron a la vencida... por que las “terceras” lo suelen ser.

Calificación: 7/10.

HELMET "Meantime" (1993, "Alternativo")


Corría el año 1993 y era muy amigo de un flaco con el que nos intercambiabamos muchísimas cintas/CDs. Si bien yo escuchaba mucho thrash metal estaba siempre atento a lo que el escuchaba, a él le encantaba el thrash pero a la par compraba mucho material “alternativo”. Para aquellos años el grunge ya estaba instalado en la escena y lateralmente a él salían bandas que no se ajustaban a sus cánones ni a los metálicos. Eso sentí cuando ví en el programa “Headbangers Ball” de MTV dos video clips (¡¡¡Qué viejo estoy!!!) de Helmet.

Cuando este amigo me prestó el CD me voló el mate a primer oída y en tres días lo adquirí en la Bond Street con casi desesperación (Los más viejos.... ¿Recuerdan cuando sabían que un CD específico y no muy divulgado estaba en un lugar y sentían la sensación de querer tenerlo ya?). En dos semanas lo gasté como cincuenta veces y durante meses no se salía de la bandejita del minicomponentes.

Constantemente tenemos la costumbre de rotular una propuesta, cosa comprensible porque sino uno no sabría referenciar como suena algo, aunque sea, por aproximación. Helmet escapa a cualquier etiquetamiento “rígido”. Estamos ante una banda con una densidad de violas impresionante, cada riff de Page Hamilton (Cerebro de la banda y vocalista además) y Peter Mengede te llevan puesto y dan la impresión de desintegrar hasta la más mínima molécula. Y se suceden con una monotonía que no molesta pero potencia el efecto de choque que generan (Ej: “Ironhead”).

La base es titánica, el baterista John Stanier pareciera asesinar el redo, con una pegada fuerte y “seca”, secundado por el bajo bien grave de Henry Begdan. Por ende, lo más aproximado que puedo usar para significar a esta maravilla es una banda que toma aspectos de Black Sabbath en cuanto a lo denso y pesado de sus temas, y algún elemento sutil de hardcore que se cuela producto de provenir de una ciudad en donde ese género es sólido (Nueva York) lo cual deriva en composiciones sencillas - eficaces antes que eficientes – y muy agresivas.


Un disco para escuchar de corrido, cada tema es una bola de demolición que se va a estampar a toda velocidad contra un murallón para hacerlo completamente bosta. Hamilton vocalmente por momentos entona en una vena que lo emparenta al mismismo Ozzy Osbourne, el CD no da ganas de ser detenido y pide tema tras tema que le subas más el volumen al equipo.

El punto más alto es “Unsung” con unos riffs cortantes, secos y monolíticos (Con un gancho extraño), y un remate descomunal en donde la banda pone los motores al máximo. Creanme, escuchen este tema desde 02:33 hasta el final lo más al mango que puedan y sientanse arrollados. Otros temas como “Better” y “Turned Out” tienen un groove raro y una sincronización instrumental increíble.

Y como si fuera poco, ese verano me fui de vacaciones a Florianópolis y tuve la suerte de verlos en vivo, en un show donde tocaron casi por completo este CD: si en estudio demuelen, en vivo te exterminan a pura densidad y decibeles (Altísimo el volumen al que tocan sin sacrificar claridad en el sonido).

Demás está decir que los demás temas no mencionados se la recontrabancan. “Meantime” pega, pega y vuelve a pegar una y otra vez con resultados excelentes. De más está decir que si no fuera por esas guitarras que se llevan puesto todo no sería lo mismo pero. Mientras lees esto te puedo asegurar de que es un disco que antes de morirte tenés que escuchar aunque sea una sóla vez, si es que no te mataron en la primera oída.

Calificación: 9/10.